No improvisaban: su objetivo eran dos BMW 330 y una camioneta BMW X1. Luego de sorprender y maniatar a los empleados de la concesionaria con precintos plásticos, uno de los tres delincuentes sacó de un bolso negro varias chapas patentes y las colocó en los vehículos elegidos, antes de escapar andando en ellos.
Ese robo en la agencia Bremen Motors SA, de José Cubas al 3100, en Villa Pueyrredón, fue uno de los golpes que dio entre mayo de 2010 y abril pasado esta banda, que no sólo se dedicaba a robar concesionarias: también eran de su interés las chapas patentes de autos estacionados en la vía pública, que usaban para colocarlas a los que sustraían de las concesionarias.
El modus operandi está descripto en la investigación realizada por el fiscal de Núñez-Saavedra José María Campagnoli y su equipo, que pidió el juicio para uno de los presuntos asaltantes, identificado como Emanuel Fernández, por los delitos de robo agravado, encubrimiento y portación de arma de guerra.
Fernández tiene 27 años, es electricista y mensajero. Según el pedido de elevación a juicio firmado por Campagnoli, el 5 de mayo de 2010 a las 11.30, él y dos cómplices irrumpieron en la concesionaria Avinou Automotores, de Donado al 1100, en Villa Ortúzar. "Mientras Edgardo Gentta [empleado de la agencia] se encontraba en el local, ingresó imprevistamente Fernández junto con dos hombres, quienes, amedrentándolo mediante la exhibición de armas de fuego, le profirieron: «Sólo venimos a buscar un Línea y un Punto HLX»."
Gentta, según consta en la causa, les indicó dónde estaban guardadas las llaves de los autos, modelos 0 km sin patentar. Antes de escapar, los delincuentes encerraron al empleado en el baúl de un auto de la concesionaria.
Cuatro meses después, el 2 de septiembre, a las 8.30, Fernández y sus cómplices robaron aquellos tres vehículos en Bremen Motors. "Mientras Alfonso Mendoza Escobar y Juan Pablo Torres se encontraban cumpliendo funciones dentro del local escucharon que golpeaban la puerta, y al abrir ingresaron dos hombres que, amedrentándolos con armas de fuego, los obligaron a movilizar los vehículos que se hallaban allí con el objeto de permitir la salida de dos BMW 330 y una camioneta BMW X1 que pretendían sustraer", sostuvo Campagnoli en su dictamen.
Después, los ladrones obligaron a los empleados a ponerse contra la pared y los maniataron con precintos plásticos. "En ese momento ingresó un tercer asaltante, que poseía un bolso color negro, y extrajo de su interior varias chapas patentes que colocaron a los tres automóviles con los que después se dieron a la fuga", según se reconstruyó en el expediente.
Los delincuentes cometieron un error: olvidaron el bolso negro con una pistola 9 milímetros y once cartuchos. Tanto en el robo de Avinou Automotores como en el de Bremen Motors, en el momento del robo se activó la conexión del teléfono celular de Fernández.
La investigación no está cerrada. Campagnoli seguirá con la pesquisa para tratar de dar con los cómplices y determinar una eventual participación de uniformados, ya que en los procedimientos para dar con la banda se secuestraron armas pertenecientes a personal de la Policía Federal
Fuente: la Nacion
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